Investigación descubre asociación predictiva entre condición física y calidad de vida en adultos mayores chilenos

Por María José Marconi / [email protected]

En las últimas décadas, Chile ha visto un cambio importante en la composición etaria de su población. Como sucede con otros países en vías de desarrollo, el promedio de edad de la población chilena ha ido aumentando progresivamente. Pese a que Chile aún está lejos de tener los porcentajes de adultos mayores del primer mundo, es importante tener en mente que se trata de una tendencia al alza.

En ese marco, un estudio realizado por investigadores de la Universidad Andrés Bello, Universidad de Granada y Universidad Católica de la Santísima Concepción, busca entender de mejor manera el vínculo existente entre la capacidad física y la calidad de vida relacionada con la salud (CVRS) del adulto mayor, de manera tal de poder observar -e intentar prevenir- cualquier condición que pueda amenazar su independencia funcional.

Según explica Dr. Francisco Guede Rojas, investigador de la carrera de Kinesiología y de la Facultad de Ciencias de la Rehabilitación de la Universidad Andrés Bello, “los resultados pueden ayudar al diseño de políticas públicas que apunten a generar intervenciones efectivas tendientes a reducir el riesgo de discapacidad, y a su vez, mejorar la calidad de vida de personas mayores”.

Capacidad física y Calidad de vida relacionada con la salud.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) describe el estado de salud del adulto mayor en base a la capacidad para desarrollar con normalidad su vida cotidiana. La CVRS representa la auto percepción de salud física y mental de los individuos, influyendo de manera relevante sobre la independencia funcional. Por otra parte, la condición física entendida como un conjunto de atributos físicos tales como la fuerza, flexibilidad, capacidad aeróbica y agilidad, también es determinantes para la conservación de la funcionalidad y autovalencia.

Los resultados de la investigación señalan la utilidad del uso de pruebas para evaluar la fuerza muscular de extremidad superior, como una manera efectiva de determinar la percepción de salud del adulto mayor. Estas pruebas demostraron ser predictores efectivos para ciertas dimensiones de CVRS: los sujetos que tuvieron mejores resultados en las pruebas de fuerza muscular mostraron mayor puntaje en las dimensiones vitalidad y salud mental, en base a un cuestionario estandarizado.

Por otro lado, buenos resultados en las pruebas de fuerza muscular mostraron también una asociación con mayores puntajes en las dimensiones de función física y dolor corporal. Según concluyen los investigadores, la evaluación de la CVRS del adulto mayor, apoyada por las pruebas de condición física sugeridas por este estudio, tienen el potencial de ofrecer una herramienta rápida y de bajo costo para el diseño e implementación de políticas públicas orientadas al bienestar de la población mayor del país.

**Artículo publicado en el Inserto de Investigación de El Mercurio (04/06/2017)**