Claudia Riedel: la importancia de la salud de la tiroides en el embarazo para el que está por nacer
La investigadora del Centro de Resiliencia a Pandemias de la Facultad de Ciencias de la Vida UNAB, y del Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia, investiga desde hace dos décadas la hipótesis de que el trastorno del espectro autista, el déficit atencional y algunas enfermedades autoinmunes pueden tener su origen en el déficit de la hormona tiroidea tiroxina (T4) durante el embarazo.
La inspira “contribuir a que el potencial de desarrollo que tiene un ser humano no se vea limitado desde antes de nacer”. Junto al equipo que lidera, identifica biomarcadores que ayuden a detectar si una persona fue gestada con este déficit hormonal, lo que permitiría evidenciar sus efectos en el neurodesarrollo y tomar decisiones de cuidado. En paralelo, la investigación se ha enfocado en evaluar la posibilidad de que la inflamación sistémica en la madre, inducida por este déficit, afecte el desarrollo cerebral; de comprobarlo, se podría acceder a tratamientos con dietas antiinflamatorias para proteger el embarazo.
Actualmente, trabajan en un prototipo de test de orina para monitorear los niveles de esta hormona en embarazadas, método más accesible y ágil que los exámenes actuales, el cual está en proceso de patentamiento.
